25 de Junio de 2021
No fue sueño
ni fantasía
cuando en el viento
oí tu suave voz
murmurando mi nombre
a través del océano.
Cuentan las gaviotas
en estridente algarabía,
que enrojeces
al pedir a las estrellas
un marino errante,
para ser de el
navío,
faro
y amante.
Fui a todas las costas
puertos
y muelles
preguntando por ti
a pescadores y viajantes.
Hasta que supe
que el viento
te lleva mi aliento.
Con tristeza
he de decirte
que alcanzar mi nave
es mi destino
Pero…
¡Al diablo el destino!!
Iré por ti primero
a tomar tu mano,
tus abrazos
tus suspiros
y tus sueños
Solo una cosa…
una sola petición
de un hombre
de piel salada
y manos curtidas
No me pidas tiempo en tierra
pues nunca he poseído
ni dominado
ese reloj hambriento
de hombres
sin mares
ni puertos
Pero
si quieres acompañarme
en esta travesía
desayunarás
café humeante,
tibios panqueques con miel
y mis ojos frescos
de verte cada día
como un paraíso
Si un día
imaginas que solo eres
mi pasatiempo
ya te habré perdido.
Pero si crees
que mi amor
es un desafío
ya por siempre
a tu lado
me habrás conseguido
Y me harás olvidar
que alguna vez
tuve un barco
un nombre
un puerto
y un destino.
No necesitaré nada más
pues
ya serás
todo el mar que necesito.